El emprendimiento de joyería comenzó a gestarse hace algunos años cuando me encontraba cursando la licenciatura de bellas artes en la Universidad Nacional de las Artes de la Ciudad de Buenos Aires.

Todo comenzó hace unos años cuando empecé a frecuentar el taller de joyería de un amigo, quien no solo fue un gran maestro que me transmitió el  oficio sino que además me incentivó a crear mi propio taller, fue por ese motivo que fui adquiriendo mis propias herramientas, más allá de que en esa época ignoraba completamente que ese arte iba a ser mucho más que un hobby en mi vida.

Por ese entonces para poder solventar mis gastos  dividía mi jornada entre universidad, taller y un trabajo en relación de dependencia.

Pasaron algunos años entre rutina, aprendizajes y un profundo deseo de independizarme hasta ese momento veía muy lejos, pero el tiempo paso, fue necesario cambiar la perspectiva, y la experiencia fue fortaleciendo la utopía,  un día sentí que mis pies pisaban distinto y fue ahí que la semilla brotó.

Actualmente trabajo en mi propio taller con una línea exclusiva de joyería subacuática en plata y bronce con diseños únicos que están disponibles en tiendas específicas de buceo en Argentina; en Buenos Aires, Puerto Madryn y Córdoba.

Por otro lado me dedico al juego creativo del diseño de joyas en metales nobles, piedras semipreciosas, y otros materiales en una línea personalizada y experimental.

La idea del emprendimiento es crear pequeñas piezas cuyo diseño sea único, es por ello que cada alhaja es considerada una composición artística cuya confección es 100% artesanal y con una base sólida de trabajo a consciencia y esto quiere decir que se tiene en cuenta no solo el gusto estético y preferencia de cada persona, sino que además para cada proyecto se realiza un diagnostico en el que se estudian todos los elemento que se utilizaran en la obra prestando especial atención a su elección, procedencia, características y compatibilidad.

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